The Man & his
Bamboo… El hombre y su Bamboo
Bamboo has been
considered by some races as the source of origin of man. But far for many
others it has been a dependable source of food, shelter, and even a musical instrument.
In my case it was a gift from a great
friend. The plant in question was a 4 twig yellowish plant in a large planter
when it was given to me. In just three years it is now a towering 36 foot bush
that reproduces continuously and grows 4-6 inches daily.
Every so often when
the new shoots defy the odds (grow without notice) and I find them from my
second floor notice. I dedicate a Saturday or Sunday to cut down the new
offspring. When these events happen, I
normally take down 5 to 9 shoots. Also with that goes some foliage leaving
12-14 (33 gallon) trash bags.
After five years, we
are finally receiving a tropical storm in the area that once again made me go
outside and perform my duties. I always talk to my Bamboo, I appreciate its
shade, its beauty but we occasionally have to disagree, I end up cutting its
offspring and exuberant growth.
This time around it
was done cutting from bottom up, much easier than my daredevil climbing on a 20
foot ladder and defying balance a bench saw the wind, twigs in my eyes. I wore
a long sleeve shirt, gloves… better than in my previous attempts.
The cutting always
goes fast, the cleanup and cutting twigs and branches to fill the garbage bags
is the most time consuming and challenging. Fortunately my neighbor helped me
out. And the day went on into a four
hour event without a glitch. But just right at the end as we were folding twigs
to put them into the garbage bags a twig came back at me and cut my lip…
It bled pretty well
for a while and I accepted it since on this day I had killed 5 of its
offspring. And considered this act as a payback for what I have done. So we are
in peace keeping an eye on each other with this love hate relation until the
next time. The bamboo looses several of
its offspring and I always bleed someway.
El Bambú es
considerado por algunas razas como la fuente de origen del hombre. Pero ahora
para muchos otros ha sido una fuente confiable de alimentos, refugio e incluso
un instrumento musical. En mi caso fue
un regalo de una gran amiga. La planta en cuestión era una planta de 4 ramitas
amarillentas en una maceta grande cuando fue entregada a mí. En sólo tres años
ahora es un arbusto de 36 pies imponentes que se reproduce continuamente y
crece día a día 4-6 pulgadas.
Cada cierto tiempo cuando los nuevos brotes
desafían las probabilidades (crecer sin ser visto) y encontrarlos desde mi oficina de segundo piso. Dedico un sábado o domingo para cortar la nueva
descendencia. Cuando estos eventos ocurren,
normalmente tomo 5 a 9 brotes. También con estos se llenan 12-14 bolsas de basura
de (33 galones) llenas de follaje. Después de cinco años, finalmente
estamos recibiendo una tormenta tropical
en la zona en la que una vez más me hizo salir al exterior y y realizar mis deberes.
Siempre hablo con mi bambú, aprecio su sombra,
su belleza pero ahora se hizo mucho más
fácil que mi escalada daredevil en una escalera de 20 pies, lo corte de abajo hacia arriba en vez del desafio anterior en el cual me balanceaba con una cierra electrica peleaba contra el viento, las ramas en mis ojos. Esta vez llevaba una camisa de manga larga,
guantes... mejor que en mis anteriores intentos.
El corte siempre va rápido, la limpieza y
corte de ramitas y ramas que llene las
bolsas de basura es lo que más tiempo consume y lo desafiante. Afortunadamente
mi vecino me ayudó. Y paso el día casis unas cuatro horas sin una falla. Pero justo al
final como nos estábamos plegable ramitas para ponerlas en las bolsas de basura
una ramita volvió a mí y corto mi labio... Sangraba bastante bien por un rato y
lo acepte ya que en este día yo había matado a 5 de sus
descendientes. Y considera este acto como una compensación por lo que yo habia
hecho. Así que estamos en paz, manteniendos
un respeto mutuamente con esta relacion de amor y odio que nos llevara
hasta la próxima vez. El bambú pierde
varios de sus hijos y yo siempre sangro
por alguna lesion. Ocasionalmente tenemos que estar en desacuerdo,. Siempre
hablo con mi bambú, aprecio su sombra, su belleza pero ocasionalmente tenemos
que estar en desacuerdo, I acabo cortando su descendencia a la vez que pago con
mi sangre.
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